El gigante del comercio electrónico ha anunciado que ha solicitado una licencia experimental para lanzar dos satélites a la Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos.
Estos dos satélites serán los primeros que lance Amazon para comprobar si su aproximación al internet satelital es real, ya que todo lo hecho hasta la fecha es teórico.
El servicio de internet de Amazon se está desarrollando bajo el nombre en clave Proyecto Kuiper, cuesta 10.000 millones de dólares y, para quien no lo sepa, compite directamente con Starlink, el servicio de banda ancha por satélite de SpaceX.
Todos los sistemas se están probando bien en entornos simulados y de laboratorio, explican desde la compañía, por lo que las próximas pruebas en órbita serán clave para saber si la idea que tienen actualmente se puede llevar acabo.
En esta particular batalla de la guerra por el espacio comercial Bezos llega algo tarde con respecto a Musk. Y es que el fundador de Tesla y SpaceX ya lanzó sus primeros satélites para ofrecer acceso a internet desde el cielo en 2019, por lo que va a llevar más de tres años de ventaja al que quiere ser su principal competidor en este mercado. De hecho, en estos momentos Starlink ya tendría en órbita alrededor de 1.800 satélites, y para cuando se lancen los dos primeros de ‘Project Kuiper’ podría tener unos 3.000.
Es más, Starlink lleva varios meses ofreciendo el servicio en fase beta y está a punto de salir de ese estado, por lo que cuando Amazon esté preparada para ofrecer su internet satelital su competidor tendrá ya un servicio con varios años de experiencia.
Entre otras cosas, Amazon probará la velocidad máxima de los dispositivos, ya que en las pruebas anteriores demostraron que los satélites podían emitir hasta 400 Mbps de velocidad a Internet.
Si el organismo de control de las comunicaciones de EE.UU. aprueba el proyecto Amazon enganchará sus satélites al cohete RS1 de ABL Space Systems, cuyo lanzamiento está previsto para el año que viene, desde el Cabo Cañaveral de Florida.
Tras el experimento, volverán a caer sobre la Tierra, desintegrándose probablemente en el proceso, como es habitual en estos casos.
El proyecto principal, el del envío de satélites para hacer un red de internet orbital, ya ha recibido luz verde de la FCC, y se espera que un total de 3.236 satélites lleguen a la órbita baja de la Tierra antes del 30 de julio de 2029.
Los de Bezos son muy conscientes de que no van tener la ventaja de ser los primeros en este mercado, por lo que ya han desarrollado una estrategia para hacer frente a Musk: ofrecer tarifas más económicas. Aunque los costes de ‘Project Kuiper’ para los clientes aún no se conocen, Amazon señala en el comunicado que su objetivo es “brindar un servicio rápido y confiable a un precio más asequible”.
Y es que uno de los principales hándicaps que, hasta el momento, tiene el servicio de Starlink son sus elevados precios, al menos los que ha establecido para la fase beta del proyecto. Así, hace unos meses supimos que el coste del hardware -antena, cables y router- era de 499 euros, los gastos del envío 60 euros y la cuota mensual de 99 euros al mes.