El vehículo formado por bytes sobre ruedas fue creado por un grupo de exempleados de BMW y Apple, en la parte frontal posee una pantalla táctil que permite “reimaginar”, lo que el conductor o acompañantes sienten dentro de un auto convencional.
Cuenta con una tableta en medio del volante y una pantalla adicional en la parte trasera de cada asiento, la primera muestra videoclips, calendarios o datos médicos, al sentarse las cámaras internas podrán identificar quién es el conductor y cargan su perfil, ajustando las posición del asiento y otras características. También cambia el paradigma porque desterrará el concepto de propiedad. El Byton estará destinado a empresa de ‘car sharing’ (coche compartido). La cosa será como sigue: solicitas tu Byton, te dan una ubicación, te acercas el coche, te detecta y te abre las puertas y, puesto que tus preferencias están guardadas en la nube de internet, automáticamente te pondrá el climatizador en la temperatura que deseas, la posición del asiento según tu estatura e incluso sonará tu banda preferida por el equipo de música. Solo tendrás que decirle: “a la oficina”, y el Byton te llevará diligentemente.
Para empezar, en el desarrollo del nuevo Byton ya no se tendrá en cuenta el poder de los caballos, sino el “poder de los datos”, como declaró Breitfeld, el CEO de la compañía. Y añadió: “Nos interesa más la velocidad de los datos que los kilómetros por hora”.
El modelo saldrá por primera vez de la cadena de montaje de la planta que la firma tiene en China dentro de dos años. ¿Y qué es lo realmente revolucionario? Su grado de conducción autónoma,que será absoluto y garantizará, además de las cero emisiones, los cero accidentes. Algo con lo que la empresa está muy concienciada: en el país asiático mueren, cada año, unos 100.000 conductores.