Un terreno fangoso y olvidado, encajado entre una central eléctrica de gas y una planta de desguace de coches, albergará a finales de la semana que viene el aerogenerador más alto de Inglaterra.
La turbina, que medirá 150 metros de altura desde la base hasta la punta de la pala, es propiedad de un grupo de vecinos de Lawrence Weston, una urbanización deprimida de la periferia de Bristol, y parte de los ingresos que genere se destinarán a ayudar a la comunidad local.
Mark Pepper, fundador de Ambition Lawrence Weston para regenerar el barrio, en el que ha vivido toda su vida, afirma que es un alivio ver que por fin comienza la construcción tras siete años de recaudación de fondos, reuniones y cumplimiento de los requisitos de planificación introducidos por el anterior primer ministro, David Cameron, que han convertido los nuevos parques eólicos terrestres en una rareza en Inglaterra.
«Es un gran logro que hayamos conseguido como comunidad empobrecida», dice en el centro comunitario de la urbanización, que es la base del grupo y está a menos de ocho kilómetros de la turbina. «Espero que dé a la gente confianza en que puede conseguir cosas, confianza en que tiene un futuro mejor y más brillante y una conexión más fuerte con la emergencia climática».
Se espera que la turbina, con una capacidad máxima de 4,2 MW, empiece a vender energía a la red a partir de mayo y genere más de 100.000 libras al año para Lawrence Weston. Pepper afirma que los ingresos, tan desesperadamente necesarios, se destinarán a ayudar a los vecinos afectados por la crisis energética, por ejemplo, a proteger sus casas de las corrientes de aire, a proporcionarles dispositivos de ahorro energético, como ollas de cocción lenta, y a aumentar los fondos de emergencia.
«Los usuarios de contadores de prepago se están autodesconectando. Hoy acabo de firmar 12 solicitudes de 100 libras cada una para pagar el crédito de emergencia de personas que se han quedado sin él. Están a punto de quedarse sin calefacción ni electricidad», explica Pepper. «Hay padres solteros, familias trabajadoras y jubilados; es una auténtica mezcla».
Ingenieros de Ambition Community Energy, que gestionará la turbina en nombre de Ambition Lawrence Weston, se encuentran in situ para ver cómo una grúa de 121 m ensambla las cuatro secciones restantes de la torre de la turbina, que pesan 80 toneladas cada una.