En el camino a la transición energética, los autos eléctricos deben solucionar primero algunos problemas. La IA podría ayudar en ello.
El sector transporte contribuye con 37% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a nivel mundial. Éste es uno de los principales factores que inciden en el problema del cambio climático para las generaciones futuras. Entre otros, el dióxido de carbono en la atmósfera, a partir del uso de combustibles fósiles, absorbe y emite radiación que contribuye a que cada vez aumente más la temperatura en todo el planeta, sobre todo en comparación con los niveles que se registraban antes de la Primera Revolución Industrial.
Si llegamos a superar en 1.5ºC esos registros preindustriales, el mundo en el que vivimos será completamente distinto. Y, en buena medida, inhabitable. Por ello, se hace un esfuerzo enorme porque industrias relacionadas con la transportación transiten hacia modelos más sustentables, como es el caso de los autos eléctricos. O de plano insistir en usar vehículos de 0 emisiones, como las bicicletas.
Fuente: sopitas.com