Platzhirsch combina innovación y artesanía en un solo vehículo
Emplea una tecnología denominada fusión selectiva por láser (LSM) para crear componentes de acero ecológico y reciclable.
El mundo de las bicicletas eléctricas no deja de crecer, no solo por el aumento de adeptos sino también por el amplio escaparate de alternativas que ofrece el mercado. Los avances tecnológicos y de fabricación han situado a este sector a la vanguardia innovadora, a un nivel similar al que estábamos acostumbrados a ver más habitualmente en los coches o las motos.
En este sentido, cabe señalar la denominada Platzhirsch, una propuesta eléctrica de dos ruedas que llega de la mano de la firma alemana Urwahn Bikes. Una de las primeras características que llama la atención a simple vista es la forma de su cuadro, pues el tubo donde se introduce la tija del sillín tiene una forma distinta a la tradicional.
Más allá de este detalle de diseño, que hace que el propio cuadro ejerza una función de suspensión, hay que destacar que estamos ante una bicicleta en la que dicho cuadro está impreso en 3D. Su proceso de fabricación mezcla sofisticación y filosofía artesanal al mismo tiempo. Y es que, para empezar, se emplea una tecnología denominada fusión selectiva por láser (LSM) para crear componentes de acero ecológico y reciclable.
Con asistencia eléctrica
Ofrece una autonomía de 80 kilómetros, con 60 km adicionales si se opta por la extensión de rango
Tras ello, cada uno de estos componentes se lija y se suelda a mano para lograr el resultado que ves en las fotografías. A pesar de que esta bici eléctrica no integra amortiguadores, su fabricante ha buscado una destacable suavidad de marcha gracias al diseño específico, sobre todo, del triángulo trasero (sin olvidar que, en esta bici, su forma no es exactamente triangular).
La asistencia eléctrica de la Platzhirsch corre a cargo de un motor Mahle de 250 W. No hay que pasar por alto el par motor de 40 Nm, que ayuda a obtener buen rendimiento incluso en terrenos con bastante desnivel.
Siguiendo con las características de su sistema eléctrico, hay que tener en cuenta que su batería ofrece una autonomía de 80 kilómetros, cifra que puede incrementarse otros 60 km adicionales si se opta por la opción de extensión de rango, con una batería adicional instalada en el cuadro como si fuera un bidón de agua.
Sin amortiguadores
El propio cuadro ejerce de suspensión
Entre el equipamiento del vehículo de Urwahn Bikes se encuentra también la transmisión por correa Gates Carbon CDX, que se distingue por ser silenciosa y de suave funcionamiento. Se estima que la vida útil de este componente puede llegar a los 30.000 kilómetros.
La dotación de la bici eléctrica incluye también manillar y tija de sillín LightSkin con iluminación LED integrada en ambos casos, para ver y ser vistos cuando pedaleemos de noche o en condiciones de baja visibilidad. En lo que respecta al peso, se trata de un vehículo de solo 14 kilos, lo que facilita las cosas cuando tengamos, por ejemplo, que levantarla a pulso para subir o bajas escaleras.
El precio de esta bici eléctrica alemana ronda los 4.700 euros.